Si te gustan el mundo digital, la palabra responsive seguro que te resulta familiar. De no ser así, no pasa nada porque en breve te cuento un poco más sobre ella y porque me gusta la idea de aplicarla en la vida personal y profesional.
Imagino que estarás pensando que esa palabra no está en el diccionario de la RAE, pues no, es una palabra en inglés. Sin embargo, a mí me encanta el concepto y considero de gran importancia disponer y aplicar el efecto responsive en la actualidad.
¿Qué es Responsive?
Resposive quiere decir que tiene la capacidad de adaptabilidad al entorno, este fenómeno se aplicaba a las webs y hace referencia al diseño web multidispositivo. Algunos de sus beneficios a la hora disponer de una web así era la usabilidad, es decir mejorar la experiencia de usuario, además de evitar contenidos duplicados, reducir el tiempo de desarrollo y mantenimiento.
Para ponerte en contexto, hace unos años las webs eran rígidas y estáticas y eso estaba bien en su momento porque las veíamos desde un ordenador. Sin embargo, con el tiempo se quedaron obsoletas. Eso sucedió cuando comenzamos a utilizar otros dispositivos; tablets, smartphone… Imagínate, al navegar por internet las webs se veían fatal, vamos que hacía daño a los ojos.
En el universo digital todo va muy rápido, Google se dio cuenta de ello y era algo que perjudicaba a las empresas visualmente, de manera que si querías estar en Internet uno de los requisitos era que fuese responsive. Tanto es así, que desde 2016 Google te penaliza si no tienes una web resposive.
Fíjate, esta crisis nos ha sacudido a todos en todos los sentidos. Siento que hemos sido empujarnos a conectar con algo más allá de lo que hacíamos en el día a día, a parar y reparar. Algunas personas han sido conscientes de la vida que estaban llevando y han dado prioridad a lo que de verdad es importante en día a día. Otros se quedan en la queja absoluta de todo lo que ha sucedido.
También se ha dado un gran tirón de orejas aquellas empresas que no estaban por la labor del teletrabajo manteniendo una gran resistencia y rechazo al cambio. Y finalmente aquellas que lo han llevado a cabo porque era lo que tocaba han visto que se puede tele trabajar y conciliar. Así mismo se les ha dado un empujón aquellas empresas que no tenían plataforma digital, y también aquellas que aún no tenían estrategia digital siendo conscientes de la importancia de la flexibilidad y adaptabilidad. Incluso los negocios que se desarrollan en físico han encontrado la manera de fortalecerse a través de tácticas digitales.
Desde mi perspectiva pienso que la situación nos invita a un cambio de mentalidad, a reinventarse porque lo que estábamos acostumbrados hacer ahora ya no se puede hacer desde la rigidez. La dinámica anterior no volverá a la normalidad.
Nuestra respuesta a la situación tiene que evolucionar como las webs, desde la capacidad de adaptabilidad y flexibilidad mental. Recuerda un pilar fundamental es aprender aceptar los cambios.
Te propongo ir chequeando tu capacidad de adaptabilidad y flexibilidad en tu día a día, es decir, tu capacidad de adaptar y ajustarte al entorno y para ello tienes que tener una perspectiva abierta de curiosidad y optimismo. Piensa que ese es el ambiente no lo rechaces aprender a vivir con él. Digamos que esas son las nuevas condiciones personales o profesionales. En lugar de sentirnos como victimas e ir a la deriva.
Yo elijo ser la capitana de mi barco. Recuerda que en aguas tranquilas no se hacen buenos capitanes. Saber cuál es tu norte es algo que debes tener muy presente así cuando lleguen las turbulencias y todo se tambalee. Ten el faro que te guie por donde seguir en esos momentos y darle un sentido. Piensa que esta es una gran oportunidad de construir un gran futuro. Indudablemente en esos momentos de incertidumbre, ahí entraría el circulo vicioso o el circulo virtuoso tú eliges con cual quedarte. Si eliges el círculo vicioso hay resistencia pero si eliges el circulo virtuoso ahí hay aceptación. Claro que la situación es la que es, ahora de aquí en adelante ¿qué voy hacer al respecto?
Creo en ti y en tu grandeza.